SuPLiCa

VENCEDOR:
Me gusta viajar y como he dicho en otro momento, siento pánico a los aviones. Admiro otras culturas. Me encantan las fotografías que plasman la imagen de un vietnamita curtido y envejecido por su arduo trabajo, la de unos chinos entre arrozales con sus impresionantes indumentarias,la de un árabe cuya piel aparece arrugada por sus penurias o porque el rigor del desierto a esculpido en su rostro las mismas estrías que causa la falta de agua en la tierra, las de africanos, que en su tez negra dibujan años vividos o mejor dicho años sobrevividos, peruanos en la cordillera de los andes con su Yama o Cuy. No sé a qué etnia podría parecerme, pero me recuerda a esas fotos que tanto me gustan, que tanto me dicen, no solo de la etnia a que pertenezcan, sino al país del que proceden,y lo vivido del protagonista. La vida me ha dado muchos varapalos, sinsabores, pero también me ha dado alegrías, me ha dado unos sobrinos a los que adoro, una princesa de cuento "Rosa", que dice quiere ser veterinaria, y un "príncipe" amante de cuanto bicho ve: Pokemon, Gurmitis, Bakugan, de los cuales sabe: nombres, formas, poderes... y seguidor de todas las historias de "Bichos" habidas y por haber. "El Rey León", "La Edad De Hielo 1-2-3", Madagascar 1 y 2", "Las Tortugas Ninja", "Nemo", "Hermano Oso", "Espanta Tiburones", todo son bichos, bichos a los cuales hasta me ha hecho cogerles simpatía y cariño. Adoro los animales como he dicho, pero odio profundamente a los reptiles y ahora, poniéndome en el lugar de ese ser especial, ese pequeño Gran Hombre que es mi sobrino, juzgaré esta foto. Lo haré, desde la perspectiva de un amante del cine de animación y amante de todos los "Bichos" aunque se arrastren: "Veo como una especie de Higuana tío,una higuana cuando sale del cascaron, alarga su cuello y levanta la cabeza OBSERVANDO EL MUNDO. O es una pequeña tortuga, no, mejor dicho, una gran tortuga, ya entrada en años, que saca fuera de su caparazón su cabeza y abriendo sus ojos, OBSERVA EL MUNDO. O tal vez, algún místico reptil, perdido en una isla remota y aun sin explorar, que desde sobre una roca, estira su cuello para desde arriba OBSERVAR EL MUNDO. No sé si es "Raphael, Leonardo, Michelangelo o Donatelo" tío, -diría mi sobrino, mi príncipe- como buen amante de las tortugas ninja, pero alguno de ellos está con la cabeza estirada OBSERVANDO EL MUNDO". Pero sabedor de su humor, también se que diría: "Tío, que feo quedaste", mientras me miraría serio, para luego reírse. Lo adoro, me hace reír más que esas películas de bichos. Y si, mi "Príncipe":
"AQUI ESTOY OBSERVANDO EL MUNDO".

FOTOGRAFO:
Nuestros pensamientos, sueños, ilusiones, alegrías, penas, experiencias... son reflejadas por nuestro rostro a través de expresiones, de gestos, de miradas, sonrisas, lágrimas... y esto no escapa a una cámara fotográfica, bien es cierto que una misma expresión nos puede decir varias cosas a la vez y llevarnos a confusión. En este gesto, en esta mirada alzada veo una súplica, veo la típica imagen de quien implora su bienestar, su alegría, su sosiego, su descanso, de quién está viviendo una amarga experiencia y añora una vida más llevadera, una vida que quizá ha vivido anteriormente. Esta imagen ha tenido una doble lectura: la visión expectante y esperanzadora de un vencedor y la amarga observación de un fotógrafo que llevado por el dolor y la impotencia, por la nula capacidad de dar feliz fin a una súplica posiblemente ha errado a la hora de titular una foto. Finalmente me quedo con una tercera lectura, con la lectura hecha por un inocente “Príncipe”, por un ser en el que aún no cabe ni maldad ni el pesimismo, me quedo por siempre con la lectura de quién guiado por su amor y amamante de lo irreal, ve en este rostro a uno de sus ídolos animados, de quién conocedor de su tito del cual sabe su nombre, forma y poderes, le ve como su gran héroe, como el poseedor del poder, de la verdad y la victoria.
Queda un día menos para la victoria.