HuNDiMieNTo

VENCEDOR:
Soy agnóstico pero rezo en los aviones. Soy vago pero pongo empeño. Soy romántico pero duermo solo. Soy amable pero insoportable. Soy liberal pero no permito que fumen a mi lado. Soy libertino pero no me gustan las orgías. Creo en la democracia pero no me gusta ir a votar. Creo en la libre competencia pero no me gusta competir con nadie. No soy chismoso pero veo programas Rosa. Soy vanidoso pero no me hago la manicura. Creo en la superioridad de Occidente pero no conozco Oriente. Amo los animales pero odio los reptiles. Soy tímido pero no tengo pudor. Soy impúdico pero no me gusta andar desnudo. Me gustan los bancos pero no me gusta ahorrar. Me gusta hablar por teléfono pero no que suene el teléfono. Creo en el capitalismo pero no tengo capitales. Estoy a favor de la globalización pero no la de mi cuerpo. Quiero globalizarme pero visitando todo el Mundo. Creo en la convivencia mutua pero no en la convivencia conmigo. Soy coherente pero inconsecuente. Tengo principios pero me gustan que se terminen. Creo en la Virgen de Las Nieves pero no en la de Guadalupe. Soy intolerante con los que no me toleran. Me gusta el arte pero me aburren los museos. Creo en el aborto pero amo la vida. Creo en ti pero no te conozco. Creo en la ESPERANZA pero odio el verde.
Y esto es lo que dice ese esbozo de sonrisa que dibujan mis labios, mi rostro... ESPERANZA.

FOTOGRAFO:
Te veo y no te conozco, te escucho y no te entiendo, te estudio y no te aprendo. Tenme paciencia te conoceré, te entenderé y te aprenderé.
He visto muchos edificios hundirse por enfermedad y otros muchos por envejecimiento, en ambos casos sus días estaban contados. He visto muchos edificios hundirse por remodelación, por mejoras que alarguen sus días contados. Tú estás en remodelación, te estás haciendo más fuerte, más humano y finalmente estás alargando tu vida.
Te conozco y sé que este hundimiento es debido a la fatiga al cansancio de un ajetreado día, tu hundimiento moral jamás nadie podrá decir que lo ha visto y si por ti ha pasado... ¡qué bien lo escondes vencedor!. Ahora nuestras columnas están unidas por la misma viga y esta viga equilibra y refuerza nuestras columnas de forma que si la viga se tambalea todas nuestras columnas le seguirán, tu hundimiento es mi hundimiento y tu fuerza es mi fuerza. Vencedor, este título no lo comparto, no es hundimiento lo que vi, vi cansancio, fatiga y sobre todas las cosas sentí como tu esperanza me envolvió y multiplicó la mía al tiempo que me susurraba: “Es necesario esperar, aunque la esperanza haya de verse siempre frustrada, pues la esperanza misma constituye una dicha, y sus fracasos por frecuentes que sean, son menos horribles que su extinción. Si supiera que el mundo se acaba mañana, yo, hoy todavía, plantaría un árbol.
Queda un día menos para la victoria.